Guion: Sam Jiltirn / Dibujo: Jim Starlin
"Warlock es la cumbre de la concepción cósmica y psicodélica que Jim Starlin hace del universo Marvel. Recogiendo el testigo de Estela Plateada (que había desaparecido de su propio título en 1970), Warlock se convirtió pronto en el más filosófico y espiritual de los superhéroes de Marvel, junto con Captain Marvel (cuyas aventuras fueron también escritas e ilustradas por Starlin entre 1973 y 1974).
La década de 1970 fue un período de escasa supervisión editorial en Marvel. Se dijo que algunos creadores, como Starlin, Steve Gerber y Steve Englehart entregaban su trabajo directamente al director de producción de Marvel, John Verpoorten (todo esto cambiaría con la llegada de Jim Shooter como editor en jefe en 1978). Uno de los resultados de esta libertad de acción fue un buen montón de plazos incumplidos, y otro buen número de números reeditados. Pero fue también el período que vio nacer algunas de las obras más innovadoras de Marvel: Howard el pato, Los Defensores, Morbius el vampiro viviente, Capitán Marvel y Warlock.
El Warlock de Starlin es una figura atormentada. Acompañado de su satírico compañero Pip, se enfrenta a una malvada versión de sí mismo, al mesiánico Magus, de la Iglesia Universal de la Verdad, y a otras amenazas. La serie fue finiquitada en noviembre de 1976.
La obra de Starlin alcanzó la madurez durante la producción de Warlock. Su habilidad para convertir el collage de viñetas en instrumento para diseccionar la acción se remonta a la obra de anteriores artistas gráficos, como Bernard Krigstein." [1].
[1] Cita de Richard Reynolds, en "1001 Cómics que hay que leer antes de morir", Grijalbo, 2012, pág. 365.
La década de 1970 fue un período de escasa supervisión editorial en Marvel. Se dijo que algunos creadores, como Starlin, Steve Gerber y Steve Englehart entregaban su trabajo directamente al director de producción de Marvel, John Verpoorten (todo esto cambiaría con la llegada de Jim Shooter como editor en jefe en 1978). Uno de los resultados de esta libertad de acción fue un buen montón de plazos incumplidos, y otro buen número de números reeditados. Pero fue también el período que vio nacer algunas de las obras más innovadoras de Marvel: Howard el pato, Los Defensores, Morbius el vampiro viviente, Capitán Marvel y Warlock.
El Warlock de Starlin es una figura atormentada. Acompañado de su satírico compañero Pip, se enfrenta a una malvada versión de sí mismo, al mesiánico Magus, de la Iglesia Universal de la Verdad, y a otras amenazas. La serie fue finiquitada en noviembre de 1976.
La obra de Starlin alcanzó la madurez durante la producción de Warlock. Su habilidad para convertir el collage de viñetas en instrumento para diseccionar la acción se remonta a la obra de anteriores artistas gráficos, como Bernard Krigstein." [1].
[1] Cita de Richard Reynolds, en "1001 Cómics que hay que leer antes de morir", Grijalbo, 2012, pág. 365.
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